Santa María en el proyecto de Salvación
Santa María en el Proyecto de Salvación (Parte Primera)
Tengo tanto que decir y aún mucho que reflexionar sobre Nuestra Santísima Madre Santa María pero como todo en la vida, la mejor manera de emprender una aventura es dar el primer paso y deseo comenzar de esta manera:
Dios siempre cumple sus promesas y cada acción para ejecutarla es prevista minuciosamente. Nos prometió un Salvador en el relato del Génesis 3:15
"Enemistad pondré entre ti y la mujer, y entre tu linaje y su linaje: él te pisará la cabeza mientras acechas tú su calcañar."
Desde aquel momento Dios ya había elegido a una joven de Nazaret, llamada María para cumplir su designio divino.
Y para cumplimiento de tan divino designio, la eximió de la ley universal del Pecado original. Ni por un momento se encontró bajo el influjo del Maligno
María Prometida de José
En aquel entonces, las mujeres no gozaban de los derechos que hoy tienen. Era un mundo tosco, las mujeres necesitaban un hombre que las tutelara y protegiera. Sin mencionar la estigmatización que sufrían las madres solteras, es así que para dicha labor designará a José un hombre justo menciona la biblia (y esto es mucho decir son muy pocos los justos mencionados con nombre en los relatos bíblicos). Por ello, sabemos que José era considerado un hombre virtuoso y de gran amor a Dios.
Mateo 1:19-21 "Su marido José, como era justo y no quería ponerla en evidencia, resolvió repudiarla en secreto. Así lo tenía planeado, cuando el Ángel del Señor se le apareció en sueños y le dijo: «José, hijo de David, no temas tomar contigo a María tu mujer porque lo engendrado en ella es del Espíritu Santo. Dará a luz un hijo, y tú le pondrás por nombre Jesús, porque él salvará a su pueblo de sus pecados."
Dios nos brinda luz en momentos de oscuridad y confusión, sobre todo si no comprendemos lo que a nuestro alrededor pasa y no solo nos brinda información sino que también nos procura la gracia necesaria para el cumplimiento de su plan Divino
Hágase en mi Según tu Palabra
Lucas 1: 38 "Dijo María: «He aquí la esclava del Señor; hágase en mí según tu palabra.» Y el ángel dejándola se fue."
Es en ese preciso momento en el que cielo y tierra se unen. Cuando Dios Espíritu Santo,
Posándose sobre ella, engendro al Niño Dios. Dándose inicio a nuestro proceso de Salvación.
Es probable que, quién hasta aquí lea estas líneas, a simple vista conozca la historia y aunque acompañada de algunos contextos históricos o breves reflexiones mi intención es que me acompañen a contemplar la escena y juntos maravillarnos de aunque se trate de un hecho conocido, no pierda lo extraordinario.
Los primeros pasos del camino quizás sean de imágenes conocidas pero de pocos iremos adentrándonos en reflexiones cada vez mas profundas y renovemos nuestro agradecimiento para con Dios por tan maravillosos detalles para nosotros sus hijos.
Bilbo Meditando
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